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En la Semana de la Lactancia Materna, la Dra. Karen Martel explicó los beneficios de amamantar y dio algunas recomendaciones al respecto en relación a una serie de mitos que se mantienen actualmente.
"Es la forma natural de alimentar al bebé, durante más de cien años nos transformamos en ladrones de leche de vaca", indicó. En esa línea, explicó que la leche materna es un tejido vivo específico para cada especie y a partir de la promoción de las industrias lácteas fuimos cambiando la cultura de la lactancia.
Martel señaló que el acompañamiento del entorno de la mamá es fundamental para que de esta forma se colabore en la lactancia.
"No puede recaer toda la responsabilidad sobre la mamá para que ella se siente tranquila a amamantar", afirmó.
La especialista remarcó que los profesionales de la Salud deben estar capacitados para dar respuesta a las dudas de las madres. En cuanto a los lugares de trabajo, señaló que el 77% de las mujeres piensa que no podrá sostener la lactancia al reincorporarse a su espacio laboral. Por esto, subrayó que las legislaciones deben garantizar el respeto a las licencias y se deben generar lugares donde puedan amamantar.
"Se ha perdido la función de la teta que es alimentar por una relación sensual", sostuvo.
Cuáles son los mitos en la lactancia
1. “Si el bebé llora o no “aguanta” las tres horas, la leche de la madre no es suficiente”.
La leche materna se digiere rápidamente (en promedio en 60 a 90 minutos) por lo que es normal que el bebé pida con frecuencia. Además, existen periodos de crecimiento acelerado (brotes de crecimiento) y de desarrollo neurológico (saltos mentales) en los cuales el bebé puede necesitar más tomas y estar más sensible e irritable.
2. “Mi leche no es buena porque está aguada”.
Las diferencias en la leche entre diferentes mujeres es escasa, incluso mujeres con alimentación deficiente, la calidad de la leche suele ser buena.
3. “La lactancia es algo natural, si no funciona es que la madre tiene poca leche”.
La lactancia es un proceso de aprendizaje social, no un proceso totalmente instintivo y debe ser a libre demanda (sin contar horas entre tomas ni el tiempo en cada pecho). Si por alguna razón dejas espacio entre tomas, tu cuerpo pensará que no necesita producir tanto y bajará la cantidad.
4. “Los bebés deben alimentarse de ambos pechos en cada toma”.
El bebé decide cuando soltarse del pecho. El estímulo de producción de leche se inicia con la succión y es transicional. Al principio, está compuesta principalmente por agua y lactosa; al final, es rica en grasas. Por lo que, si se cambia al niño de pecho antes de que éste se vacíe, el bebé sólo consumirá la primera leche y no obtendrá los componentes totales en cada toma. Esto provoca falta de saciedad, poca ganancia de peso e incluso molestias digestivas en el bebé.
5.“Los bebés deben alimentarse de un solo pecho en cada ocasión”.
Cuando el bebé se suelta del pecho, se ofrece el segundo. Si se prende, debemos dejarlo continuar su toma.
6. “Los bebés deben mamar 15 a 20 minutos en cada toma, después sólo toman aire”.
La lactancia materna debe ser a libre demanda, sin horarios y sin presiones. Conforme va creciendo el bebé, va adquiriendo mayor habilidad para alimentarse por lo que, es normal que al principio le tome más tiempo terminar sus tomas. Es anatómicamente imposible expulsar aire a través del pecho.
7. “Para que el niño duerma toda la noche, hay que darle un biberón”.
El sueño de los bebés es un proceso neurológico madurativo que termina de desarrollarse alrededor de los 6 años de edad. Los bebés requieren alimentación frecuente debido a que están ganando peso de manera acelerada; darles un biberón con leche artificial en la noche sólo consigue disminuir la producción materna de leche.
8. “Un biberón es una “ayuda” para la madre y permite que los pechos se llenen mejor”.
La glándula mamaria es un mecanismo que se autorregula, no es un contenedor. Durante las primeras semanas de vida de tu bebé, gracias a las hormonas del embarazo, se fabrica más leche de la necesaria. De este modo se asegura que el bebé no pasará hambre. Cuando la glándula empieza a adaptarse a la demanda del bebé, se ajusta la producción a la cantidad de leche que necesita. Además, ofrecer el biberón solo favorecerá la aparición del “síndrome de confusión del pezón”.
9. “Debes tomar atole o calditos para aumentar la producción de leche”.
La producción de leche es como un restaurante, a mayor demanda, mayor producción de leche.
10. “Mi mamá y mis tías no pudieron dar de lactar, en mi familia no somos lecheras”.
La producción de leche no tiene que ver con la suerte o la herencia, sino con la frecuencia con la que se da de mamar al niño. No contar con la experiencia familiar de haber lactado, puede dificultar la lactancia al disminuir la confianza en la madre, pero esto no ocurre si está bien informada y recibe apoyo.
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