Abuso policial en Resistencia: le pidieron su número de teléfono por ayudarla a arrancar el auto

Este sábado pasado, un grupo de jóvenes que transitaban por Av. 9 de Julio casi Av. Italia, debió detenerse por defectos técnicos en el vehículo en el que se trasladaban.

Ante esto, reciben la intervención de un patrullero de la Policía del Chaco que se detuvo, en un primer momento, para ayudarlos.

"Fue a las 23.50 de la noche, donde varios chicos piden ayuda a un patrullero que pasaba y uno de los policías ingresa al auto para hacerlo arrancar mientras sus amistades salían a empujar quedando mi hija de 18 años en la cabina junto al uniformado", relata Silvio.

Según el testimonio, la joven consulta al agente si el vehículo podría volver a detenerse. Ante esto, el uniformado le pide el número de teléfono, a modo de intercambio por la ayuda.

Si bien, los datos son un tanto confusos, lo cierto es que el grupo de amigos logró arrancar el auto y se encargó de tomar imágenes del patrullero a modo de evidencia.

La identidad de la chica es reservada por miedo a represalias, pero el testimonio de su padre no persigue una denuncia sino una advertencia tanto para los tutores como para los jóvenes atento a los despropósitos que habitualmente se conocen por parte de algunos efectivos de la fuerza policial.

"Mi hija vino llorando ya que confiaron en el personal policial y se encontraron con una situación que reviste una barbaridad ya que representan a una institución", comentó y agregó: "Yo quería que tanto los padres como las chicas sepan que se deben cuidar en la noche".

Silvio aseguró que su pretensión está lejos de generalizar, sino de alertar a la comunidad para prevenir este tipo de hechos.

Hechos que se reiteran
Estas situaciones se repiten y parecieran ser parte de un "folclore" que resulta nocivo tanto para el funcionamiento como para la identidad de la institución policial.

A lo largo de la provincia existen muchísimos testimonios de identidades femeninas que, al presentarse en sede policial u otra situación similar, son acosadas por efectivos luego de brindar datos de contacto.