Semana del parto respetado: "La violencia obstétrica es la más invisible de todas"

"Una doula es una mujer capacitada y formada para brindar acompañamiento en la gestación, el parto y el posparto. Hay tres pilares: el acompañamiento informacional sobre la preparación con perspectiva de género y derechos, el sostén emocional que la acompañe y durante el trabajo de parto y la cesárea el acompañamiento físico y emocional", explicó.

"Hay evidencia científica de que la presencia de la doula reduce los partos instrumentados, el pedido de anestesia, la mujer tiene un mejor recuerdo de su parto, las lactancias se instauran más exitosamente, entre otros beneficios", enumeró.

Sobre la ley de Parto Respetado, manifestó que "no se implementa en la práctica, por eso los sucesos de violencia obstétrica siguen sucediendo y con la pandemia se recrudecieron aún más".

"Hoy nos toca informarnos y ponernos en pie de lucha porque del lado del sistema médico hegemónico no encontramos la asistencia que garantice el pleno ejercicio de nuestros derechos", expresó.

¿Qué pasa con las cesáreas?

"En el sector privado manejamos tasas que superan el 70% de cesáreas a nivel país. La OMS fija un 10 o un 15% tolerable, más arriba estamos aumentando las tasas de morbimortalidad. Estas tasas son criminales", remarcó.

"Las cesáreas innecesarias suceden diariamente, minuto a minuto", afirmó.

Violencia obstétrica

"La violencia obstétrica es la más invisible de todas. En ese momento podemos llegar a sospechar que el trato no estuvo bueno, pero estamos tan vulnerables, tan rotas y llenas de violencia en nuestro cuerpo que puede llevar años saber que fuimos violentadas", manifestó.

"Es por eso que cada vez somos más las organizaciones de la sociedad civil que bregamos por apropiarnos de estos derechos, porque el cuerpo legal vasto y pionero no tiene implementación en la realidad", aseguró.

Pos parto

Acerca de las visitas a la mujer y el recién nacido planteó que "están culturalmente establecidas pero no son necesarias, todo lo contrario".

"Esa transición es importante entre la pareja y el niño que acaba de llegar, necesitan conocerse, adaptarse y para eso necesitan intimidad. Las visitas, si llegan, tienen que llegar para servir, pero nunca para dar opiniones sobre la mujer", recomendó.