Raúl Barboza, el acordeonista: "Fue el hombre que hizo trascender al chamamé a nivel mundial”

El mundo de la música argentina despide a uno de sus máximos emblemas: Raúl Barboza, acordeonista y compositor considerado el gran embajador del chamamé, falleció este 27 de agosto en París a los 87 años.

“Sin duda, fue el referente más importante que tuvimos, el hombre que hizo trascender al chamamé a nivel mundial”, expresó en Radio Libertad Walter Bordón, productor de Música Sin Etiquetas, quien trabajó junto al músico durante más de dos décadas.

Barboza nació en Buenos Aires en 1938, hijo de un correntino estibador del puerto que le regaló su primer acordeón a los siete años. Desde entonces abrazó el chamamé como bandera y construyó una carrera que lo llevó a compartir escenarios con Astor Piazzolla, Mercedes Sosa y Atahualpa Yupanqui, además de recibir premios en Argentina y Europa.

Radicado en París desde 1987, Barboza se convirtió en un referente de la música popular argentina en el mundo. Sin embargo, mantuvo siempre un fuerte vínculo con el litoral y con festivales chaqueños, como el Festival del Taninero de Puerto Tirol, donde fue parte desde la primera edición en 2003 hasta este mismo año.

“Raúl siempre fue generoso. No solo vino al festival, también se quedó un día más para compartir un asado y tocar con músicos jóvenes y consagrados. Todos lo escuchábamos en silencio cuando hablaba, porque era un gurú del chamamé”, recordó Bordón.

El productor destacó también la humildad del maestro: “Muchas veces prefería comer en casa, con algo sencillo, en vez de ir a un restaurante. Para nosotros era un placer enorme acompañarlo”.

En los últimos meses, Barboza realizó una gira por Brasil, donde también dejó un legado imborrable dentro de la música gaúcha. Allí trabajó con artistas como Renato Borghetti y Luis Carlos Borges, y fue adoptado como maestro por nuevas generaciones.

Su salud, sin embargo, se vio afectada por problemas renales en los últimos tiempos. Según relató Bordón, el músico planeaba regresar a la Argentina a fin de año para radicarse definitivamente en Buenos Aires junto a su esposa, Olga Bustamante. “Ese era su deseo, volver. Lamentablemente no pudo concretarlo”, lamentó.

La noticia fue confirmada por su representante en Argentina, Alberto Felici, a través de redes sociales. Su mensaje reflejó la tristeza de la comunidad artística: “Con profunda tristeza comunico el fallecimiento del Maestro Raúl Barboza, ocurrido en la tarde del 27 de agosto en París”.

“Para nosotros Raúl ya es un santo en vida. Un hombre que abrió ventanas para el chamamé en todo el mundo. Su huella es imborrable”, concluyó Bordón.

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