Romero confirmó que el policía demorado negó haber llevado a la joven: qué pruebas estudia la fiscalía

La investigación por la denuncia de una joven de 21 años que aseguró que un chofer de Didi, que resultó ser un sargento primero de la Policía del Chaco, la encerró y quiso inyectarla, sumó la palabra oficial de Fernando Romero, jefe de la Policía del Chaco, quien explicó paso a paso cómo se actuó desde el primer momento y qué pruebas se están analizando.

En diálogo con Libertad, Romero detalló que la fuerza se enteró del caso primero por redes sociales, cuando la joven publicó lo ocurrido. “Ya sabíamos que estaba en el Departamento de Violencia de Género para erradicar la denuncia”, explicó.

“El conductor trabó las puertas y la amenazó con una jeringa”, lo que denunció la joven

Según la denuncia radicada por la víctima, durante un viaje solicitado por aplicación, el conductor desvió el recorrido, activó el seguro de las puertas y la amenazó con una jeringa antes de liberarla.

Romero confirmó que ese fue el contenido inicial del escrito, y que inmediatamente se dio intervención al fiscal de género, el doctor Víctor Recio.

El acusado se presentó solo: “Fue porque lo estaban escrachando”

La novedad más fuerte revelada por Romero es que, mientras el caso se viralizaba, la Policía tomó conocimiento de que el presunto chofer se había presentado por voluntad propia en Investigaciones. “Resultó ser un efectivo policial en actividad. Se presentó para erradicar denuncia porque familiares le avisaron que lo estaban escrachando en redes sociales”, dijo Romero.

El hombre negó haber trasladado a la joven y aseguró que ese día condujo para la plataforma, pero que no la levantó.

Romero fue categórico al remarcar un punto que el hecho dejó expuesto: “Por ley, la única actividad permitida como complemento es la docencia. Ninguna otra actividad es compatible con la función policial.” Por lo tanto, aun si la causa penal terminara archivada, el sargento enfrentará un sumario administrativo por ejercer una actividad prohibida.

Detención, liberación y unificación de causas

Tras la intervención de la Fiscalía, Recio ordenó la aprehensión preventiva del empleado policial. Fue identificado, notificado y liberado en la medianoche del domingo, supeditado al expediente. Además, el fiscal decidió unificar las dos denuncias: la de la joven y la del propio sargento.

Romero confirmó que Recio ordenó una batería de diligencias cruciales: rastrear el recorrido del viaje mediante GPS de la aplicación Didi, ubicar antenas de celulares del chofer y la víctima, acceder a registros de la plataforma, relevar si testigos vieron bajar a la joven en el punto señalado y pericias al vehículo.

“Todas esas diligencias las está realizando la Dirección de Investigaciones y el Departamento Cibercrimen. El conductor niega haberla levantado y por eso el fiscal quiere cerrar cada punto con tecnología”, explicó.

Sin vínculo previo y sin hipótesis de “operación”

El jefe policial descartó dos versiones que circulaban: que víctima y acusado se conocieran previamente: “No surge de ninguno de los escritos”, dijo. Que se trate de una presunta operación contra la plataforma:“No tenemos esa versión”, aclaró.