Pediatras alertan por el aumento de casos de tos convulsa y llaman a reforzar la vacunación

La Sociedad Argentina de Pediatría (SAP) emitió una alerta sanitaria ante el aumento de casos de tos convulsa o coqueluche en todo el país. En diálogo con Radio Libertad, el doctor Sergio Antúnez, médico pediatra, explicó que se trata de una enfermedad bacteriana altamente contagiosa y prevenible, y remarcó que “algo está fallando” cuando existen muertes por una patología que puede evitarse con vacunación.

“Han muerto cuatro chicos en lo que va del mes y se han triplicado los casos de tos convulsa en 2025 respecto de años anteriores. Si tenemos cómo prevenirla y aun así aumenta, algo está fallando”, sostuvo Antúnez.

¿Qué es la tos convulsa?

El especialista explicó que la tos convulsa, también conocida como coqueluche, es una infección bacteriana causada por la Bordetella pertussis. Se transmite por vía aérea y afecta principalmente a los niños menores de cinco años, aunque los adultos también pueden contagiarla.

“Es una enfermedad bacteriana, no viral, por lo tanto requiere tratamiento con antibióticos. Pero lo más importante es la prevención: vacunar antes de que el niño esté expuesto”, enfatizó.

Vacunas: la herramienta más efectiva

Antúnez recordó que la vacuna quíntuple protege contra la coqueluche y se aplica en tres dosis: a los 2, 4 y 6 meses, con refuerzos a los 18 meses y al ingreso escolar.
Además, los adolescentes (11 años) y adultos deben recibir la triple bacteriana acelular, especialmente quienes conviven con bebés.

“Hoy podemos vacunar a las embarazadas y a los abuelos, porque la vacuna acelular es segura. Todos los que están en contacto con un recién nacido deberían inmunizarse”, subrayó.

Según el médico, en Argentina las coberturas de vacunación están por debajo del 75%, cuando el ideal debería superar el 95% para lograr inmunidad colectiva. “Si yo vacuno a mis hijos, protejo a tus hijos. Y si vos vacunás a los tuyos, protegés a mis nietos. Las vacunas salvan vidas y cambian la historia de las enfermedades”, reflexionó Antúnez.

Síntomas y señales de alarma

El pediatra explicó que los padres deben estar atentos ante tos persistente de más de dos semanas, episodios de tos explosiva que provocan vómitos, o dificultad para respirar. En lactantes pequeños, el cuadro puede agravarse rápidamente y requerir internación.

“Un niño con tos prolongada o que tiene coloración azulada en los labios debe ser evaluado cuanto antes. Pensar en coqueluche puede salvarle la vida”, advirtió. El tratamiento, aclaró, se realiza con antibióticos específicos como azitromicina o trimetoprima-sulfametoxazol, siempre bajo indicación médica.

Vacunar a las embarazadas, clave para proteger al recién nacido

Antúnez insistió en la importancia de vacunar a las embarazadas a partir de las 20 semanas de gestación, ya que los anticuerpos se transfieren al bebé y lo protegen durante los primeros meses de vida, cuando aún no puede recibir la primera dosis.

“Vacunar a las embarazadas es fundamental. Los bebés no pueden recibir la vacuna antes de los dos meses, por eso la inmunidad materna es su escudo inicial”, explicó.

“La tos convulsa no debería matar a ningún niño”

El pediatra cerró con un mensaje contundente a las familias y al sistema sanitario: “Tenemos todas las herramientas para evitar estas muertes. Las vacunas son seguras, gratuitas y están disponibles en los centros de salud. No hay motivo para no proteger a nuestros chicos.”

Mirá la entrevista completa.